Saltar al contenido

Tus cactus sanos y vigorosos

cactus varios

¿Sabías que tener cactus sanos, sin problemas de hongos y enfermedades es más fácil de lo que parece? He pasado más de la mitad de mi vida cometiendo errores para descubrirlo, la mayoría de la veces siguiendo consejos que me llevaban al fracaso. Sin embargo este camino me ha enseñado que funciona y que no.

Mi deseo es enseñarte todo lo que se, para que puedas convertirte en un cultivador de cactus profesional sin que sufras estrés por perder tus preciadas suculentas.

¿Qué es un cactus?

La palabra cactus proviene del griego «kaktos» que hacía referencia a una planta con espinas. Sin embargo existen muchas plantas suculentas con espinas o púas, que no son cactus.

Características principales de un cactus

Las principales características para reconocer un cactus son:

Areolas de los cactus

Las areolas de los cactus son hundimientos que presentan en su epidermis, desde donde brotan los gloquidios y las espinas. Estos órganos de los cactus son capaces de generar flores, así como también ramificaciones.

areolas-cactaceae

En realidad, las areolas poseen dos puntos de vegetación: uno del que nacen las flores y los brotes, mientras que de el otro, nacen las espinas. Ambos pueden estar en la misma areola o separados, encontrándose uno sobre el tubérculo y el otro desplazado a la axila del tubérculo.

Espinas de los cactus

Las espinas de los cactus nacen de los tejidos más profundos de la planta. Su forma y color varía de una especie a otra, existiendo cactus que no tienen espinas, o para decirlo de forma correcta no se desarrollaron. Esto sucede generalmente en los epifitos, donde las espinas se encuentran latentes.

espinas-cactus
espina-cactus

Las espinas de los cactus son hojas modificadas, tejidos muertos que están mineralizados, que pueden ser duros o blandos como cerdas o pelos.

Hay espinas con distintas superficies y estilos, pueden ser lisas, rugosas, aplanadas, rectas, cilíndricas, ganchudas, curvas o cónicas. Pueden ser de hasta 20 cm o muy pequeñas, que pasan casi inadvertidas.

Gloquidios de los cactus

Son conocidos por diferentes nombres como janas, penepes, puquios, quepos o aguates. No todos los cactus presentan gloquidios. Son tan finos que su base es débil, por lo que se desprenden fácilmente del cactus.

cactaceae
Créditos Succu, zoom by RoRo

Es muy difícil extraerlos de la piel, porque en su composición, un extremo de las celulas que estan en su superficie se divide, quedando como un gancho.

Pelos de los cactus

Existen muchas especies de cactus que presentan pelos. Estos pelos, llena los lugares que dejan libre en las areolas, los gloquidios y las espinas. Los pelos se presentan como una sola fila de células huecas.

cactus con pelos
cactus con pelos

Los pelos pueden ser cortos o largos. En la Parodia por ejemplo, cuando el suelo tiene mucho nitrogeno o poca luz, los pelos suelen ser más largos.

Tallos de los cactus

Los cactus tienen tallos suculentos, con pocas excepciones como los Perskia. Los tallos de los cactus se conservan verdes por muchos años y así cumplen la función fotosintética de las hojas.

cactus tallo

Los tallos suelen tener forma de cilindro o de globo, y de ellas derivan las demás formas que pueden llegar a tener los cactus. También podemos encontrar cactus con forma aplanada en su periferia, o cactus con tallos inversamente cónicos que están enterrados, quedando solo en la superficie un plato espinoso, con su raíz también cónica.

Raíces de los cactus

Las raíces de los cactus suelen ser fibrosas y presentan muchas ramificaciones que por lo general, salen de una raíz principal de forma cónica. Los pelos celulares y las ramificaciones de más abajo, son lábiles y mueren. Sin embargo si tienen humedad vuelven a crecer rápidamente.

cactus raices
En esta foto podemos apreciar las raíces de un cactus al ser trasplantado a un nuevo sustrato.

Muchas veces las raíces crecen a lo largo en forma horizontales y de esa manera, le pueden sacar mayor provecho a las lloviznas e incluso al rocío. En algunos géneros, las raíces son gruesas para almacenar almidón y agua, en otras las raíces tienen forma de cono invertido y se las llama napiformes.

Flores de los cactus

Las flores de los cactus son llamativas y atractivas por su variedad de colores y el gran tamaño que tienen en algunas especies.

En su mayoría, están formadas por numerosas partes como el receptáculo, ovarios, estilo, tépalos, estambres, tubo floral, pelos y cerdas y estigma.

Mammillaria--flor

Los cactus suelen ser hermafroditas, esto significa que en la misma flor existen órganos femeninos y masculinos. Sin embargo, algunas Opuntia y la Mammillaria dioica, poseen especímenes machos y especímenes hembra.

Frutos de los cactus

En realidad deberíamos hablar de pseudofrutos ya que son tejidos del tallo. Por lo general los frutos de los cactus son bayas carnosas y jugosas, aunque podemos encontrar también plantas cactáceas que dan frutos secos, como cápsulas que pueden abrirse o no hacerlo.

fruto del cactus

Las bayas poseen las semillas dentro de la pulpa, la cual es jugosa y atrae animales que se encargan de luego esparcirlos por todos lados.

Algunos frutos tienen areolas con espinas, pelos o cerdas, otros areolas simplificadas con cerdas o con pelos, o algunos incluso con nada.

Características del cactus

No todas las plantas que parecen cactus, lo son. Existe muchas variedad de plantas con espinas, que no son cactus, como así también plantas sin espinas que sí lo son.

Cactaceae
Cactaceae

Los cactus o las cactaceae se distinguen por ciertas peculiaridades que son:

Poseen ovario ínfero, ya que la porción de la planta que cuando se fertiliza se convierte en fruto o semilla, se encuentra ubicada debajo del resto de la flor.

Poseen fruto unilocular, esto significa que la baya o cápsula no tiene divisiones en el interior que delimiten semillas.

Poseen un estigma plurilobulado.

Poseen semillas dicotiledóneas.

Poseen areolas, un rasgo muy distintivo de las Cactaceae. Es una elevación desde donde pueden salir pelos, espinas y particularmente las flores y los brotes. En las Cactaceae se pueden extirpar las espinas de las areolas, sin dañar la epidermis del cactus. Cosa que no ocurre con otras suculentas, ya que las espinas forman parte de su tejido y al extirparlas se daña su epidermis.

La gran mayoría de las Cactaceae son suculentas, es decir plantas que han desarrollado formas de reservar el agua por ser de lugares donde hay sequía durante largos periodos.

Configurar cookies